Entrevista a MATTHEW GOODE (OZYMANDIAS en "WATCHMEN")

por John Millar





MATTHEW Goode no soñaba siquiera con tener la más mínima oportunidad de conseguir el papel de Ozymandias en ‘Watchmen’, la esperadísima versión cinematográfica de esa novela gráfica de culto.

Este actor británico de 30 años no era un fan de los cómics, así que era totalmente ajeno a la historia de ‘Watchmen’ (que aparece en la revista Time en una lista de las 100 mejores novelas en lengua inglesa de la época moderna), y no comprendía por qué estaban tan emocionados los fans ante la inminente llegada de este enfoque tan diferente de los superhéroes.

“No tenía ninguna noción de lo que estaba pasando cuando hice la prueba”, explica Matthew, quien estaba en mitad del rodaje de ‘Regreso a Brideshead’ cuando le invitaron a hacer una prueba para el papel de un personaje a quien se describía como ‘el hombre más elegante del mundo’ y que tenía un físico atlético.

“Y yo pensaba: ‘¿Quién va a darme a mí ese papel?’ No sé nada sobre él, soy 15 años demasiado joven y no soy rubio, y además soy bastante esquelético”.

Además de todos esos aspectos tan negativos a los que tenía que enfrentarse, Matthew tuvo que pasar su prueba grabada para la película en una circunstancias que sólo pueden calificarse como de lo más extraño. ¡Porque creó su versión de Ozymandias en el cuarto de baño!

“La única habitación que pudimos encontrar para grabar las dos escenas que me habían enviado era la habitación de mi hotel”, recuerda el actor. “Mi dormitorio no tenía buena iluminación, ¡así que terminamos haciéndolas en el cuarto de baño conmigo sentado en la taza del wáter con una sábana blanca detrás!”

“Así que no pensaba volver a tener noticias del director Zack Snyder, pero absurdamente decidió darme el papel. Me sentí muy sorprendido cuando me llamó”.

Antes de ‘Watchmen’ (su mayor y más ambiciosa película hasta la fecha), Matthew había aparecido en papeles físicamente mucho menos exigentes, por ejemplo en la película de Woody Allen ‘Match point’, y más recientemente en “Regreso a Brideshead’, en la que interpretó a Chales Ryder.

Así que, una vez que le contrataron para ‘Watchmen’, Matthew tenía que ponerse en forma para las escenas estrepitosas y repletas de acción que se ven en ‘Watchmen’. “Fue un trabajo bastante duro”, dice a propósito del programa de entrenamiento. “Y gracias a Dios teníamos a especialistas que hacían cosas”.

“¡Ozymandias ya es de por sí un papel bastante difícil de hacer creíble sin que yo tenga que ser uno de los mejores luchadores del mundo!”, dice. “Pero los especialistas eran asombrosos, el mío era el tipo más fuerte que hayas visto nunca, ¡y firme como una pared! Me gustó entrenarme bajo el mando de esos tipos”.

El régimen de ejercicio y entrenamiento implicaba que Matthew tenía que realizar cada día tres sesiones de rutinas físicamente exigentes.

“Probablemente fui el que menos hizo de todos”, dice, añadiendo con un tono de auto desaprobación, “… y no estoy seguro de que aprendiera a luchar bien”.

Para el apretado programa del rodaje, Matthew permaneció seis meses en Vancouver y, aunque sintió el beneficio del entrenamiento, su programa de trabajo implicaba que la preparación iba a ser un poco dificultosa de orquestar. “Llegué directamente de ‘Retorno a Brideshead’, descansé un día y empecé directamente. De repente estaba en el plató aprendiendo a dar patadas de kárate. ‘Watchmen’ era algo completamente diferente para mí después de ‘Regreso a Brideshead’, en donde no podía hacer nada físico, y entonces (para ‘Watchmen’) engordé unos seis kilos, aunque de puro músculo, por supuesto”, dice con una sonrisa.





“Comía un montón de pechugas de pollo y de barritas de proteínas, pero luego tenía un fin de semana libre y me tomaba unas copas. Pero en general estaba mucho más saludable de lo que estoy ahora”.

Pese al trabajo realizado para estar preparado físicamente, Matthew recibió unos cuantos golpes y moratones durante el rodaje de las secuencias de acción. La herida más grave fue cuando se lastimó una rodilla durante una escena con el Doctor Manhattan, interpretado por Billy Crudup.

“Tenía que dar una carrera y resbalar fuera de vista, pero mi traje era de fibra de neopreno y el suelo era de mármol (caucho y mármol no combinan bien), así que cuando entré a toda velocidad me hice lo de la rodilla. Fue como una de esas lesiones de los futbolistas. Fue doloroso, y estuve cojeando un mes”.

“Yo no quería armar un alboroto, pero entonces mi rodilla empezó a chasquear. Así que me hicieron una radiografía y dijeron que estaba bien, y que no me había roto nada, pero entonces un par de días después me hice una resonancia magnética, ¡y me dijeron que tenía un buen agujero en la rodilla! Así que esperé a terminar el rodaje, y me hicieron una cirugía no invasiva. Aún lo siento los días fríos. Pero he estado haciendo ejercicio, salí a correr esta mañana, y está bien”.

Uno de los aspectos más excitantes de esta película era interpretar a un personaje tan enigmático como Ozymandias. “Es un personaje con una gran dualidad”, dice Matthew. “Está el hecho de que es un poco delincuente a la vez que es un ciudadano ejemplar con su emporio comercial, y además en su infancia tuvo que ocultar su inteligencia. Están toda esa clase de cosas”.

Hasta que le llamó el director Zack Snyder, Matthew no había oído hablar de la novela gráfica ‘Watchmen’. “No crecí con ellos (los cómics) en absoluto… quizás estaban los tebeos de Beano o de Dandy cuando era muy pequeño, pero no sabía nada en absoluto acerca de esto (‘Watchmen’)”, dice.

Pero después de haber leído el cómic de ‘Watchmen’, se dio cuenta de por qué había tanto alboroto por hacer por fin una película partiendo de una historia con muchos niveles y que había sido calificada anteriormente como imposible de rodar. “Fue alucinante de verdad”, dice Matthew. “Está escrita de manera tan inteligente y complicada y abarcando tantos temas que hoy sigue funcionando”.

El argumento de ‘Watchmen’ está ambientado en unos Estados Unidos alternativos en los años 80 en los que Nixon sigue en el poder, EEUU ha ganado la guerra de Vietnam, y los superhéroes disfrazados son aceptados como parte de la sociedad. A medida que el reloj del Fin del Mundo (que marca la tensión entre los USA y la Unión Soviética) se aproxima a la medianoche y se teme un holocausto nuclear, se descubre un complot para matar y desacreditar a todos los superhéroes.

Aunque quedó inmediatamente seducido por la fuerza y la imaginación de la historia de ‘Watchmen’, el joven actor admite que seguía sin darse cuenta de la magnitud de este proyecto cinematográfico hasta que puso por fin los pies en el plató.

“Me di cuenta de lo grande que iba a ser esta película cuando me vi al lado de Billy Crudup, que llevaba puestas unas mallas para captar sus movimientos (como el Doctor Manhattan) con miles de cámaras alrededor. Puede parecer una broma, pero no me di cuenta de verdad de la magnitud de la película hasta que entré en los estudios de sonido y vi cuanta gente había allí. ¡Me alegro de no haber sabido su magnitud con antelación, pues entonces hubiera estropeado la prueba!”

El actor también era consciente desde el principio de que trabajar con el director Zack Snyder iba a ser una experiencia memorable. “Sabía que visualmente iba a ser una fiesta porque eso es lo que hay en el libro. Y obviamente, el hecho de que Zack hubiera hecho antes ‘300’ quería decir que uno sabía que iba a tener su propio y específico estilo. Zack se está convirtiendo realmente en el Ridley Scott actual: es un poco visionario”.

Mientras trabajaba para llevar a Ozymandias a la pantalla, Matthew se dio cuenta de que tenía que crear una historia de fondo para un individuo tan ambiguo moralmente. “Me gustó la idea de jugar con la mitología de alguien que nunca es lo que parece”, explica Matthew, quien decidió que Ozymandias tendría unos padres alemanes y por tanto un acento.

Para captar una forma concreta de acento, habló con diversas personas que vivían en Estados Unidos pero tenían raíces alemanas.

“Tengo un par de amigos que son alemanes y que llevan bastante tiempo viviendo en Nueva York. Hablé con ellos, y parecían más americanos. Luego, hablé por teléfono con alguien que había vivido toda su vida en Norteamérica, y aún parecía increíblemente alemán”.

“Les escuché mucho de verdad, y probaba las frases, pero lo encontré un poco complicado porque no era alemán/inglés, era alemán/norteamericano”.

Con una película épica de superhéroes como ‘Watchmen’ es inevitable que haya una comercialización mundial de objetos asociados al estreno de la película. Lo que significa que, entre otras cosas, habrá un muñeco articulado de Ozymandias en todas las tiendas de juguetes. Matthew ya ha visto el muñeco de Ozymandias y le ha dado su entusiasta aprobación.

“Lo vi el primer día y me pareció bastante exacto”, dice con una risita. “A menudo, cuando uno las mira (a los muñecos de figuras de acción), no se parecen nada a la gente a la que representan, pero estos están muy bien. Mi feo careto sale muy bien”.