El nuevo trabajo animado de Disney-Pixar, «WALL.E», cuenta la historia de un robot cuya misión es recoger la basura que hemos dejado los seres humanos en la Tierra antes de mudarnos a otro planeta.
En la película hay guiños, bromas y referencias a otros filmes, algunos apenas perceptibles. Aquí van algunos de ellos:
-Dentro del camión donde duerme el robot hay más de mil objetos; entre ellos, algunos juguetes que ya se habían visto en otras producciones de Pixar, como el Dinosaurio de «Toy Story»; Lighting McQueen, de «Cars»; un globo de nieve del cortometraje «Knick Knack», una pelota de «Monstruos, S.A.», y el mismo matamoscas que ya había aparecido en «Bichos».
-Las tarjetas de identificación que se ven en la pared frontal del camión de «WALL.E» tienen la foto de los miembros reales del Departamento de Arte que crearon la película.
-El camión de Pizza Planet ya había aparecido en casi todas las películas de Pixar, desde su «debut» en «Toy Story». En «Buscando a Nemo» apareció cuando los soldaditos escapaban de la oficina del dentista. Y en «WALL.E» el mismo camión es uno de los objetos que el robot Eve escanea en la tierra, buscando rastros de vida.
-El número A113 también aparece en cada una de las películas de Pixar, en homenaje al aula por donde habían pasado los creadores Brad Bird y John Lasseter en la Universidad Cal Arts. En la película «Cars» el número figuraba en el tren que pasaba cuando McQueen salía de la Ruta 66. Y en «WALL.E» el mismo número aparece como uno de los códigos.
-En la nave espacial donde viven los humanos agregaron aire con gusto a fresas -«berry» en inglés- para poder añadir el gusto Bert Berry, el nombre del director de Arte de la película.
-Los capitanes de la nave espacial también fueron bautizados con los verdaderos nombres de algunos empleados de Pixar.
-Detrás de la voz de WALL.E (aunque no dice más de cuatro palabras) está Ben Burtt, el mismo creador de otros robots famosos: R2-D2 («La guerra de las galaxias») o Arturito (ET, el extraterrestre). Y, aunque no hable demasiado, el robot WALL.E produce nada menos que dos mil cuatrocientos sonidos diferentes, comparados con los ochocientos efectos de sonidos que había en la primera película de «La guerra de las galaxias».
-La voz del robot limpiador M-O es en realidad la grabación de la afeitadora personal de Ben Burtt. Y la voz del robot Eve es la modificación a través de ordenador de una simple grabación que facilitó una empleada de Pixar, Elissa Knight. Por último, los pasos de la cucaracha amiga de WALL.E nada tienen que ver con un insecto. Aquel sonido fue generado con el golpe de un juego de esposas que les prestó un policía.
-El efecto de sonido del viento de la tierra lo grabaron, en realidad, en medio de las Cataratas del Niágara.
-Las realistas imágenes espaciales tampoco son reales, pero están inspiradas en pinturas realizadas por la NASA.
-Aun a pesar de la variedad de colores, el verde aparece por primera vez en la pantalla cuando WALL.E encuentra la planta que tantas esperanzas genera con el desierto Planeta Tierra.
-Ésta es la novena película que producen juntos los estudios Disney y Pixar, y la primera desde «Ratatouille», que fue premiada con el Oscar como Mejor Película de Animación.
-La canción original (segura candidata para el próximo Oscar) la interpreta un cantante de «otra galaxia» como Peter Gabriel.
-La banda sonora original de la película fue compuesta por Tom Newman, con excepción de las diferentes partes de la película «Hello Dolly», que casualmente habían sido compuestas por su tío, Lionel Newman (El padre de Tom, Alfred Newman, recibió cuarenta y cinco nominaciones al Oscar como director musical).
-La idea de «WALL.E» nació hace 16 años, en 1992, cuando Pixar creó su primer éxito, «Toy Story». El rodaje comenzó nueve años después y se necesitaron cinco años para terminarla, con el mismo director de «Buscando a Nemo», Andrew Stanton, que se basó en una simple cuestión: «¿Qué pasaría si sólo quedara un robot, como el último habitante de la Tierra?»